El origen del universo

junio 30, 2009

Para hablar acerca del origen del hombre en la tierra, hay que preguntarse antes cómo se creó la tierra misma. Diversas historias y teorías se han contado a lo largo de milenios, impulsadas por la curiosidad, por la necesidad de saber quienes somos.

Podemos dividir las ideas sobre el origen en dos áreas: las cosmogonías y las teorías. Las primeras son historias de creación que involucran a seres superiores que hacen al hombre o lo ayudan a mejorar. Las segundas son elaboradas tramas de conocimientos y supocisiones que elaboran los científicos para dar una respuesta que se sustente en algunos hechos.

En clases discutiremos acerca de estas ideas. Les he recomendado en clase que investiguen sobre las diversas cosmogonías, como el Génesis, el Popol Vuh, las  tradiciones Nórdicas, griegas, africanas, asiáticas y americanas. En todas ellas el hombre es el protagonista principal, en casi todas seres poderosos intervienen para guiar nuestros destinos. En las teorías científicas no hay dioses ni titanes, pero igualmente el personaje principal sigue siendo el hombre.

Vean en el enlace la visión de Carl Sagan, astrónomo estadounidense.


Artículo sobre trazabilidad de alimentos

junio 17, 2009

La revista Consumer tiene un interesante artículo sobre la trazabilidad alimentaria y el derecho del consumidor.

http://www.consumer.es/seguridad-alimentaria/normativa-legal/2002/06/25/2442.php


El Hombre y la Biologia

junio 15, 2009

La primera asignación del Seminario de Biología y Desarrollo Humano es realizar un ensayo sobre un texto entregado en clase, de Jean Rostand, de su libro El Hombre (Alianza Editorial,1941). El ensayo no debe superar una cuartilla (ni ser de dos líneas) y debe versar sobre el destino que el hombre le da al conocimiento biológico.

El ensayo será publicado como un comentario de esta entrada, hasta el lunes 22 de junio de 2009. Cada estudiante debe colocar su nombre y cédula al final de su coemtnario. Gracias por su participación.


A/H1N1

junio 9, 2009

La gripe vino, trayendo consigo el temor de nuevo. Esta vez no son las aves, son los cerdos. Y no es en Asia, sino aquí cerquita en México. El miedo se propagó más rápido que la nueva cepa, haciendo que muchos se cerraran ante México (y no personalmente, sino como nación).

Vino la TV y nos ofreció el mapa de la gripe, Google creó su herramienta para llevar la cuenta de los casos y los periódicos copiaron febrilmente las notas que encontraban en Internet, ante la falta de fuentes científicas locales (o ante la falta de interés que una respuesta mesurada, sin pánico incorporado, podía generar en una primera plana).

Recordamos a la peste negra, a la gripe española y a la influenza aviar. Los canales de películas tal vez se vieron tentados a repetir los ciclos de películas catastróficas (Outbreak y The Andromeda Strain no pasan de moda), tal vez algún grupo de rock ochentoso haya pensado en relanzar su nombre como Virus H1 ó algo similar.

En fin, el apocalipsis se ve muy interesante por la caja mágica (y por su prima, la caja surfista), pero no nos lo imaginamos de cerca. Seguro que encerrar a toda la ciudad de México parece razonable, ¿pero acaso habrá pensado alguien en el efecto psicológico de ese encierro? Se contó a la gente como casos, expedientes, fichas con estadísticas, pero no se pensó en lo que sentía la madre encerrada en su casa esperando a una plaga que iba a buscarla, o los dueños de ventas de comidas que cerraron sus puertas no por creer en la gripe, si no por la falta de comensales. Hasta tonto debe sentirse uno sentado en la sala de la casa esperando a la pelona en lugar de someterse a la lotería diaria en la calle.

En en enlace a continuación, un artículo de la revista Letras Libres, de Mexico, sobre la visión de un residente del D.F. acerca de la gripe, de las mascarillas y de los medios.

Pandemia


Lecturas Gestión de Calidad

junio 4, 2009

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Los textos en azul al principio de este mensaje son ENLACES a archivos que se discutirán en clase. Para descargar los documentos en formato Word ó PDF sólo deben hacer click sobre el enlace. Para leer los documentos en PDF necesitan un programa como Adobe Acrobat Reader, o como Foxit Reader (que es software libre).

Hasta la clase que viene…